AL REVES

Hoy es uno de esos días que yo titularía "el mundo al revés".  Que cierta es esa frase que a veces decimos, sin darnos cuenta realmente de su calado: las vueltas que da la vida. En un rato iré a despedir a un hombre, en ese camino que ya no tiene retorno, y que un día fue mi contrario, - término que utilizamos los abogados en el argot judicial cuando nos referimos a la parte contraria-. Yo defendí a su mujer hace ya mucho, se separaron, en aquel entonces no se podía acceder al divorcio directamente, porque así lo establecía la ley. Pasados los años, volví a coincidir con él, mientras visitaba a una sobrina suya que había dado a luz. Pocas cosas habían cambiado en su vida. Su ex mujer, que nunca perdió la relación con la familia de él,  también estaba allí, junto a los hijos de los dos. Ayer falleció y la madre de sus hijos nuevamente estuvo presente, ya no en su vida, sino en su muerte. Planchó la camisa y preparó la ropa para que lo amortajaran, para que en ese su último viaje estuviera guapo y elegante, y sobretodo para evitarles a sus hijos esos detalles dolorosos que hacen más dura la despedida cuando tienes la certeza de que ya nunca volverás a tener la oportunidad de estar con ese ser tan querido. Mi reconocimiento a esa Mujer y a esa Madre que nos da una lección de amor a sus hijos, de generosidad y de paz con ella misma.